Una mosquita |
Te invito a ver el siguiente vídeo de Alan Short para que hagamos una catación del mismo y al final compartamos nuestras experiencias.
Lo primero que retumba en mi cabeza, es el pinche ruidito desesperante de la maldita mosca! ¡ODIO a las moscas! Bien podría tratarse de un episodio en mi vida.
Segundo...
Los desenlaces de cada una de las acciones, a partir del primer chingadazo al perro; provocan un blend (mezcla) de emociones encontradas. Por una parte, estoy sentado frente al monitor meándome de la risa y por otra, conteniendo mis ganas de partirle su "mauser" a esa pinche mosca que no deja de zumbar!
Finalmente tras pasar un rato Sui Generis; Alan Short, deja un par de reflexiones que espero coincidan con algunos de ustedes.
1.- Casi siempre tratamos de resolver los problemas de la manera más difícil para que al final venga un ser con menor capacidad (aparentemente) como el pobre perro y sin más ni más nos demuestre que a veces menos es más.
2.- Los seres humanos cada vez somos más egoístas. Mi tocayo "mata moscas" está totalmente inmerso en su persona y cuando un evento le provoca malestar, le da lo mismo electrocutar o madrear al perruno de su amigo (si es que así se le puede llamar.)
Definitivamente todos estamos conectados. Algunas ocasiones nos tocará jugar el papel del protagonista y otras tendremos que cuidarnos del buey que está a nuestro lado, no sea que se le ocurra chamuscarnos!
y tú, ¿Qué ves?
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Hasta la Próxima